Hacer amigos es importante en todas las etapas de la vida, no solamente durante la infancia o adolescencia.
Aún más importante que entablar estas relaciones resulta mantenerlas, y justo en ello recae el reto de las personas adultas, pues cuando se está en esta fase de la vida, las personas tienden a aislarse o a hacer de su trabajo y su familia nuclear su único mundo.
Es importante que, a cualquier edad, tratemos de hallar conexiones y nuevas amistades. Te decimos por qué:
Los amigos te mantienen saludable y pueden hacerte vivir más tiempo: De acuerdo con estudios realizados por investigadores de la Universidad Northwestern, el apoyo emocional de una red de personas (Familiares y amigos principalmente), ayuda a que las personas mayores de 80 años conserven buena memoria y función cognitiva.
Cuando preguntaron a una muestra de aproximadamente 90mil mujeres de entre 50 y 79 años, hallaron que las que tenían un círculo social más amplio y con relaciones positivas, tenían más probabilidades de tener una vida prolongada.
• Reducen el estrés: Esta es otra forma de ayudarte a mantener una buena salud. Cuando nos mantenemos cerca de personas que nos brindan seguridad y apoyo, disminuyen el estrés y la ansiedad, y con ello también se reduce el riesgo de padecer enfermedades como la depresión, obesidad y afecciones cardíacas.
• Pueden impulsar tu carrera: Tener relaciones amistosas sólidas puede ayudar a proporcionarse entre sí oportunidades de trabajo y tutorías para el desarrollo y avance profesional, y de esta manera ayudar a que quienes conforman el mismo círculo de amistad tengan una mejor calidad de vida. Se trata de una ayuda invaluable, cuyo beneficio se extiende hacia los cónyuges e hijos.
• Te enseñan sobre ti: ¿Tienes amigos que son especialmente importantes para ti? Seguro pensaste en ellos al leer este punto. Cuando elegimos, pensamos y hablamos de nuestros amigos, estamos reflejando quiénes somos y quiénes queremos ser. Cuando nos esforzamos por ser personas positivas, preparadas y competentes, es más probable que nos rodeemos de gente que posea esas mismas características. Esta circunstancia es la misma que nos hace rechazar a quienes no practican los mismos valores que nosotros.
• Simplemente te ayudan a sentirte mejor: Está demostrado que la falta de amistades y de convivencia social aumenta el riesgo de desarrollar trastornos emocionales como la ansiedad y la depresión. Los amigos son fundamentales a la hora de evitarlos. Basta con pasar tiempo de calidad con ellos para sentirnos mejor, y mantenernos en un constante estado de salud y felicidad que, en lugar de deteriorarse, incrementa a medida que pasa el tiempo y mantenemos estas buenas relaciones.
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